martes, 18 de noviembre de 2008

LAS COCINAS DE CARBÓN: ENTRE ASTILLAS, ATIZADORES DE FUEGO Y CAZUELAS QUE HIERVEN.


Ha sido en esta ocasión Nacho el que ha enviado unas fotos y un texto sobre un elemento muy habitual en los hogares de los 70-80: La cocina de carbón.

Nacho dijo: La mayor parte de ochenteros nacidos entre la generación erótica, es decir el 69, y por lo menos hasta el 75, la hemos conocido; se trata de La cocina de Carbón. Debía venir de serie con las casas, por lo menos de los hogares de la entonces clase media, y era un elemento indispensable en la cocina de cualquier casa de aquel tiempo. Constaba de una plancha negra con unos discos que se separaban con el atizador, y por donde se echaban las astillas o el carbón. Éste se recogía en forma de residuo por la parte de abajo en una puerta que se abría y que ofrecia las cenizas a un recogedor que las eliminaba.

Nuestras madres las utilizaban también para cocinar y para hervir unas enormes cazuelas (como entonces nada estaba esterilizado -¡y no nos ha pasado nadaaaa!- sumergían las cosas frecuentemente por agua hirviendo), se podían asar castañas (uhmmm que recuerdos al salir de claseeee) y todos poniamos las manos casi tocando su superficie para calentarnos del gélido invierno burgalés. Casi todas estaban hechas en una fundición de Bilbao, y con el tiempo y el desarrollo económico han sido desterradas por la comodidad del gas natural, la calefacción central, o la placa vitrocerámica. No era extraño ver gente por la calle haciendo astillas o cargando sacos de carbón a los domicilios, aún así, todavían quedan algunas carboneras abiertas como ésa que os he fotografiado en Eladio Perlado. En fin una reliquia de algunas décadas atrás, que yo no he olvidado, y que me trae buenos recuerdos pese a lo rudimentario de su funcionamiento.

Por cierto los libros ¡por supuesto! no es que quisiera quemarlos, sino que en Blogochentaburgos me han pedido que hubiera algún referente burgalés de época en las fotos. Gracias por la oportunidad, y un saludo a toda la comunidad de ochenteros nostálgicos.


5 comentarios:

Anónimo dijo...

Mis abuelos tenían una de esas. De hecho, al trastero de su casa, le siguimos llamando la carbonera. Que recuerdos me trae este bonito post! Gracias Nacho!

Francisco O. Campillo dijo...

En mi casa tuvimos una de esas cocinas ;-)

Anónimo dijo...

Por suerte en mi casa yo no he vivido esas cocinas, pero en la casa del pueblo que fue de mis abuelos allí sigue estando, y lo que disfrutamos todos los nietos "manipulando" esa cocina, que es verdad, pone algo de Bilbao o Bilbaína.

PD: Yo también tengo por casa el TODO BURGOS y el Platero y yo que supongo que sería de las Cajas.

Teresa dijo...

(y las patatas asadas, humeantes con sal... hmmmm)

Anónimo dijo...

Mis padres tenían una estufa de gasoil (hata que llegó el Gas Natural). Recuerdo que iba con mi padre a la gasolinera a llenar los bidones de gasoil (en un R-6 con baca, jejejeje).

En el pueblo tenemos una cocina de carbón, a la que mi madre llama 'cocina económica', aunque si las forjas son buenas hay gente que la llama 'cocina francesa'.

Y, sí, al trastero seguimos llamándole carbonera.