La madrugada del domingo pasado uno de los camareros de -La Espadería- moría después de cerrar este local (de los más entrañables y queridos por cualquier burgalés) parece ser que victima de una cobarde y salvaje agresión. Tenía 25 años y era padre de un hijo.
Para una generación de los 80 que hizo suyas para siempre Las dos Llanas y La Flora....
Para una generación de los 80 que convivía con peleas fortuitas, con ánimos envalentonados por el alcohol en ocasiones, y con empujones y puñetazos al aire la mayor parte de las veces sin ninguna trascendencia...
-Las muertes que en los últimos tiempos suceden en nuestras queridas Llanas son demasiadas y particularmente crueles y cobardes...-
¡BASTA YA!
¡Qué no se vayan más vidas tras una barra...! ¡Qué vuelvan a ser espacios de convivencia y disfute colectivo y tranquilo.!
D.E.P
10 comentarios:
Jovencitos, qué bien harías si ese saco de hormonas efervescentes que lleváis dentro, lo descargárais en el monte practicando algún deporte.
Pues ni me había enterado hasta ahora, y eso que estuve por las llanas hasta altas horas ese mismo día.... que vergüenza que sigan pasando estas cosas.
Acabo de enterarme de la noticia por el diario de Burgos y sinceramente, me ha producido vértigo y miedo. No tiene sentido morir por un cigarrillo.
Y ahora ¿Quién tiene la culpa de que este tipo de "personas" anden por la calle? ¿la educación, los padres, el Ayuntamiento por cerrar los bares tan pronto, la violencia televisiva, las drogas...?
Hala, ya tenemos temita para debatir...
Es una vergüenza, dos muertes en 6 meses. No sé la gente en que piensa. Y el ayuntamiento... como ya dijimos algunos (y se puede ver cada fin de semana) manda a la policia a las horas de cerrar los bares nada más. Para evitar incidentes no bastan con cerrar los bares a su hora tiene que ser un trabajo constante.
Yo sobre las 4.30 salía del Opalo y por allí no había nada todavía.
Un saludo.
Estas cuestiones, cuando no se controlan, suelen terminar con la muerte de una zona de diversión nocturna.
Mis condolencias a los familiares de lss recientes víctimas.
Que pena me da leer esto, sobre todo por el camarero muerto y su familia, pero además porque manchan de sangre y violencia un lugar que para mí siempre fué punto de encuentro y diversiones, de los mejores momentos de mi vida.
El ayuntamiento debería ponerse las pilas urgentemente
Volverá a ocurrir cualquier día. El problema está inserto en lo más profundo de la juventud actual. Nosotros (Yo 1968) estuvimos en las LLanas en una época en la que hasta las tortas y los puñetazos eran dados con más nobleza, sin tanto peligro de que un animal te pateara la cabeza. Y soy padre, y me doy cuenta.
No hay valores.
No hay represalias.
No hay conciencia.
:(
La culpa es de las autoridades, por incitar a la juventud a dar palizas de muerte.
Condolencias para su hijo y su familia
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