lunes, 15 de septiembre de 2008

EN EL DÍA DE VUELTA AL COLE... NOS VAMOS DE E.G.B ¡POR SUPUESTOOOOO!

Hoy seguramente, como buen padre ochentero, has acompañado a tus hijos a su primer día de colegio. Siendo un alivio para ti y para los abuelos, seguro que les has llevado con un poco de nostalgia de los días que tú pasaste en la extinta E.G.B , ¡NUESTRA QUERIDA E.G.B!. También te habrás dado cuenta de cuantas cosas han cambiado: Mochilas (cada vez más llenas) de diseño y colores fosforítos, nuevas herramientas escolares, colegios mixtos (afortunadamente como el de la foto) donde en tus tiempos sólo había niños o niñas, en finnnn un montonazo de cosas que no son, salvo los nervios y la alegría por los reencuentros, como eran en tus tiempos.

Sin embargo para ti en este día tan especial en Blogochenta, y para que se te pase la morriña, o para que se te acreciente, ha aparecido una vieja cartera curtida en la E.G.B frente a un colegio donde hoy han entrado cientos de carteras de marca y colorines. Para ti ha aparecido un viejo libro con su castizo logo de Hijos de Santiago Rodríguez, y una plantilla de los mapas físicos en tiempos en que no teníamos ordenadores, en tiempos en que te preparabas intelectualmente con olor a tiza y a pinturas Alpino. En tiempos inolvidables... ¡En tiempos de E.G.B!


10 comentarios:

Anónimo dijo...

Joder... Y Castilla la Vieja eran Santander, Burgos, Logroño, Soria, Segovia, Ávila, Valladolid y Palencia...

Anónimo dijo...

Hombreeeeeeeeeeee Karras kedo te echaba de menos después del verano. Pensé que ya no me ajuntabas. ;)

Anónimo dijo...

De hecho yo sigo viviendo en los tiempos de la EGB, todavía no me entero mucho de las ESOs, de las Primarias, de los Bachilleratos...

La de mapitas que hice en su día con las míticas plantillas. También me acuerdo de las plantillas de letras. La verdad que lo de hacer trabajitos en nuestra época tenía su gracia. Ahora con los ordenadores supongo que la cosa habrá cambiado.

El otro día me hizo ilusión ver a unos chavalillos con unos cuadernos de caligrafía de Rubio, que yo pensaba que ya habían desaparecido, pero no, ahí siguen.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

¡y el olor de los libros y el material escolar nuevecitos!

manzacosas dijo...

Hola. Conservo todavía mi boletín de notas del bachillerato...

Francisco O. Campillo dijo...

¡Con ese libro estudié yo!

Y allí descubrí a la Generación del 27. Fue fácil, tuve un excelente profesor: don Pedro Silleras.

Pero -en relación al comentario de este otro Pedro- nunca conocí su olor a nuevo. Ya por entonces compraba los libros usados; eran más baratos.

Anónimo dijo...

¡¡Ese era mi colegio!! Yo sufrí en mis carnes el cambio EGB-ESO, vaya tiempos!
La verdad es que produce nostalgia recordar aquellos días previos al comienzo de las clases, comprando el material, forrando (desastrosamente) los libros y borrando mis dibujos en los anteriores para que mi hermano pudiera usarlos... Y mirabas la pila de "conocimiento" que se supone que ibas a tener que memorizar y ufff... vaya pereza.
Lo mejor, ver a los amigos.

Teresa dijo...

¿Todo eso había en Castilla y Leóóón?
Yo debía estar mirando la monotonía de lluvia tras los cristales..

Yo que salí del colegio de monjas al Instituto como quién se lanza a correr la maratón, para encontrarme la única clase completa del mismo sexo, que era el mío. Muy traumático :)

Anónimo dijo...

¿y ese río-falla que queda al sur del Duero?

Anónimo dijo...

ha surgido por la rotura en un cajón de la falla del tiempo