EL AVE POR BURGOS ¡YA! dijo: He llegado hace poco a este blog gracias a que me mandó el enlace un amigo y, tengo que decir, que me encantan sus contenidos y el hecho de que se pueda participar activamente. Yo lo voy a hacer hablando de mi instituto de B.U.P (ahora no sé ni cómo se llamará a esta etapa de estudios) el mítico para todos los que estuvimos allí Instituto Félix Rodríguez de la Fuente, popularmente conocido como "El Félix" o mejor "EL Insti". En los 80, que es cuando yo empecé 1º de BUP, el instituto no tenía muchos años y era un hervidero de matrículas debido a que recogía todos los alumnos del populoso barrio de gamonal y de los múltiples colegios de E.G.B que le rodeaban.
Buffff, cuantos recuerdos. Las clases eran mixtas lo cual para algunos que veníamos de colegios católicos, era ya un logro insospechado. Encima las chicas iban sin uniforme, no como las "listas" de las Jesuitínas que las llamaban "las lechugas" por su vestimenta verde circunspecto. Todo era nuevo y eso te producía el miedo a lo desconocido. A la enseñanza, a las movidas macarroides que a veces ocurrían en la puerta como era lógico en aquellos tiempos (pero más nobles y seguras que ahora), a caer bien a tus nuevos compañeros. Los partidos en el patio eran memorables. Tanto a fútbol como a baloncesto. A baloncesto jugaban alumnos que luego formaron parte de los mejores equipos de Burgos, R.Segura, Paulino, etc. A fútbol jugábamos partidos en verano vestidos sólo con los vaqueros y zapatillas, sin camiseta ni nada. También había un buen equipo de voleibol que jugaba en el gimnasio.
En cuanto a la enseñanza teníamos muy buenos profesores, recuerdo especialmente a Jesús Melero "El Melero" un tipo un tanto "opusiano" pero que despertó en nosotros la vocación por las ciencias, por las matemáticas, por el trabajo bien hecho desde su saber inconmensurable. ¿Dónde estarán todos?. Cuando yo me fui, despuntaba un alumno que luego se ha convertido en un excelente escritor, y del que aquí ya habéis hecho reseña: Óscar Esquivias. Todavía paso por ahí y veo sentados en el césped, en los descansos, a mis compañeros: Jimenez, Fede, Toño, Hugo, Victor, cómo si fuera ayer. En finnnnnn, que gracias al Félix y a todos los profesores y compañeros que tuve; hoy soy el ingeniero que soy, una persona con conceptos y ética, y un padre que no le importaría que sus hijos recibieran una enseñanza parecida... ¡Ahora bien!...Tengo mis dudas. Un saludo a todos.